viernes, julio 26, 2024

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¿POR QUÉ PODRÍA NECESITAR MI HIJO UNA CATETERISMO CARDIACO?

La cateterismo cardíaco es un procedimiento en el que se introduce un tubo largo y flexible (catéter) dentro de un vaso sanguíneo. Luego, el cardiólogo pediatra guía ese catéter hacia el corazón para buscar y tratar los problemas cardíacos que hubiese.

Un niño puede necesitar una cateterismo cardíaco para diagnosticar un problema del corazón (cateterización cardíaca de diagnóstico). O puede necesitar una cateterización para corregir un problema (cateterización cardíaca de intervención). Suele tratarse de un problema con el que el niño nació (defecto cardíaco congénito). También puede hacerse una cateterización por ambas razones.

La cateterización de diagnóstico se usa con menos frecuencia ahora. En su lugar, se utilizan otras pruebas tales como la ecocardiografía, la resonancia magnética y la tomografía computarizada. Una cateterización de diagnóstico puede hacerse para:

  • Obtener imágenes más detalladas del corazón o de un defecto del corazón.
  • Observar el flujo de la sangre dentro del corazón.
  • Buscar presiones en diferentes partes del corazón y los pulmones.
  • Comprobar las válvulas del corazón para ver si funcionan correctamente.
  • Medir los niveles de oxígeno en diferentes zonas del corazón, los pulmones y los vasos sanguíneos.
  • Medir la actividad eléctrica del corazón.
  • Ver si hay problemas después de una cirugía.
  • Tomar muestras de tejidos para analizarlas en un laboratorio (biopsia).
  • Comprobar el corazón antes o después de un trasplante de corazón.

La cateterización de intervención ha reemplazado a la cirugía en el caso de algunos procedimientos. Una cateterización de intervención puede hacerse para:

  • Cerrar una abertura anormal entre los dos lados del corazón.
  • Cerrar vasos sanguíneos anormales.
  • Ensanchar una válvula cardíaca o un vaso sanguíneo estrecho.
  • Tratar un ritmo cardíaco anormal (si el corazón late demasiado rápido o demasiado lento).

Los cateterismos cardíacos suelen ser procedimientos seguros. Es normal que el área por donde se introdujo el catéter quede amoratada, dolorida o ligeramente hinchada durante los días posteriores al procedimiento.

Pueden ocurrir problemas más graves, pero con muy poca frecuencia. Entre ellos, se incluyen los siguientes:

  • sangrado o hemorragia
  • una reacción alérgica a los medicamentos o al material de contraste utilizado en el procedimiento
  • ataque de corazón (o infarto de miocardio)
  • accidente cerebrovascular
  • daño renal
  • problemas duraderos debido a la radiación de la radiografía.

El cateterismo cardíaco es una forma importante de diagnosticar y tratar los problemas de corazón. La mayoría de los niños no tienen problemas cuando se someten a este procedimiento y retoman sus actividades regulares al cabo de una semana.

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