Por Federico Chacón E.
Con un ambicioso programa de trabajo que aprovecha su vasta experiencia empresarial, Ernesto Francisco Vázquez Sáenz impulsa un objetivo que favorece la inclusión social de los jóvenes de Cuautlancingo, uno de los municipios poblanos que forman parte del poderoso corredor de desarrollo del estado, conurbado a Puebla capital.
Así, desde la Dirección de Desarrollo Económico municipal Vázquez Sáenz emprende una tarea que se antoja titánica para la naciente administración que encabeza el alcalde Filomeno Sarmiento Torres, proveniente del ala más progresista del Partido de Acción Nacional (PAN).

La misión se resume en una frase que el funcionario del ayuntamiento repite a lo largo de la entrevista: “Los jóvenes de Cuautlancingo aspiran no sólo a tener un empleo sino a ser empleables”. Y explica: “La economía es cada día más dinámica y eso nos impone la necesidad de la capacitación permanente en todos los sectores de la sociedad, sin importar si trabajas reparando climas o formas parte de una empresa como Volkswagen”.

De hecho, fue en la empresa de origen alemán donde Vázquez afinó la idea que fue madurando durante su intensa preparación académica que culminó con el MBA (Maestría en Administración de Negocios) y que ha venido aplicando durante su carrera profesional: convertir a la productividad en el origen y destino de los esfuerzos individuales y sociales.
“La vida me han enseñado que tenemos la obligación de transformar nuestro entorno, de contribuir a un desarrollo colectivo que sea incluyente y equitativo, que aliente la preparación continua de todos en aras de una Puebla que confirme su vocación de liderazgo regional” enfatiza.

En ese sentido, Vázquez subraya que en su decisión de participar en la administración pública -por ahora municipal- influyeron las coincidencias con Filomeno Sarmiento, un presidente municipal al que califica de “atípico” por apartarse del comportamiento “normal” en el ambiente político. “El alcalde de Cuautlancingo no sólo es un político bien intencionado, con ideas claras y un comportamiento impecable, sino que es un político alejado de las grillas y los abusos con los que la gente asocia a las autoridades”, destaca.
Y concluye: “Esta generación de servidores públicos que acompaña a nuestro alcalde no tiene otro fin que generar las condiciones para que el bien común sea realidad en Cuautlancingo, para que todos los programas y acciones del ayuntamiento se midan en los hechos, para que las palabras y compromisos políticos dejen de ser sinónimo de doblez y engaño. Y no nos vamos a esperar a que transcurran los tres años de la administración, porque todos los que formamos parte de ella tenemos la obligación de rendir buenos resultados en el corto, mediano y largo plazo. De lo contrario, de no marcar pronto una diferencia con los gobiernos anteriores, le estaríamos fallando a quienes confiaron en Filomeno Sarmiento Torres, en sus propuestas de avanzada y en su equipo de trabajo”.
